Una vez más el camino resulta más interesante que la meta. Satisfecho del resultado, pero reconozco que se aleja un poco de la idea inicial (por ejemplo pretendía que las imágenes de la calle fuesen planos subjetivos de la gente que pasaba por delante, y así saltando de una persona a otra viviésemos la realidad de Vigo más de cerca...pero faltó tiempo y tranquilidad para hacerlo). No obstante si fui capaz de llevar a cabo otras pretensiones: la música es original, en su mayoría de músicos callejeros, los poemas son de los mismos vagabundos que los leen... bueno algunas cosillas si salieron.
Este fue un trabajo realizado como proyecto final del ciclo Superior de Realización en Audiovisuales y Espectáculos de la EISV. Fue además mi primera incursión en el mundo del documental.
Nuestra guía inicial fue Belkis Vega, que por aquel entonces (2003) impartía clase en la EGACI. Nos tuvo que dejar prematuramente por motivos personales, pero tuvo tiempo a darnos unas valiosísimas clases de como hacer documentales (gracias) y descubrirnos las posibilidades narrativas y expresivas de este formato audiovisual, que en mi opinión es de los que más posibilidades ofrece, a la altura del video clip o de la video creación.